CUENTOS CLÁSICOS PARA HIPERLAXOS...

CUENTOS CLÁSICOS PARA HIPERLAXOS...
Para todos los que nos preguntamos si la historia hubiera sido diferente si los protagonistas hubieran sido diferentes... hiperlaxos como nosotros... qué hubiera pasado ???

viernes, 25 de marzo de 2016

LA TORTUGA Y EL CONEJO... LA CARRERA !



Todos conocemos el cuento del conejo y la tortuga que hicieron una carrera por el bosque... y que el conejo que estaba super confiado en sus habilidades para correr creyó que le iba a ganar a la lenta tortuga pero no lo logró... 
Luego de un tiempo en el mismo bosque un conejo resentido por las risas de los animales cada vez que se recordaba la antigua historia se propuso buscar a la tortuga del pueblo y desafiarla en otra carrera para mostrar lo rápido que era, pero en este caso estamos hablando de un conejo que además de resentido era tramposo.

La tortuga del lugar era más vieja, más sabia, todos los días tomaba su jugo de naranja... comía pan con semillas y hacía estiramientos para no quedar aplastada bajo el peso de su propio caparazón, que como una mochila, debía llevar a todos lados aunque no le gustara.
Le gustaba comer verduras de todo tipo y  frutas, también tomaba sol por la tarde cuando ya no quemaba, en cambio el conejo se levantaba a cualquier hora, se quedaba despierto hasta muy tarde para jugar en la computadora, casi no se bañaba, menos iba a hacer dietas saludables cuando solo comía papas fritas y refrescos !!!Pero era tanta la confianza que se tenia para ganar que no le importó nada de todas esas cosas y solo se dedico a burlarse de la tortuga hasta que ésta aceptara la apuesta.



La tortuga lo acepto pero no con la idea de ganarle al conejo... ella quería probarse a sí misma; qué tan lejos podía llegar? 

El día de la carrera el conejo convocó a todo el pueblo para que lo vieran, puso paradas de descanso con agua para hidratarse cuando tuvieran sed, eligió un camino con árboles para que le estorbaran a la tortuga, con sus pisos llenos de raíces que sobresalían y charcos de barro.
La tortuga vio el camino pero no se asustó, ella sabía que todo lo que se le presentara podía usarlo a su favor, eso lo aprendió durante su vida llena de peligros y problemas por ser una tortuga.

Empieza la carrera y saca ventaja el conejo!!! llega al primer puesto de agua y toma una botella pero no deja nada de agua para la tortuga, solo sigue el camino ya sin apurarse tanto y riéndose de sus maldades...La tortuga va detrás un poco lenta pero muy fuerte, en vez de saltar los charcos los atraviesa como si fuera un pequeño tanque de guerra, macizo y fuerte... llega a la zona de las raíces pero las trepa usando su fuerza para subirlas y la fuerza de gravedad para volver a bajarlas.... llega a la parada de agua pero no se detiene!!! sigue de largo y pronto llega a la parada donde el conejo se puso a descansar porque le faltaba el aire ( no estaba acostumbrado a hacer ejercicios!!! ).
La tortuga durante su vida había tenido que hacer muchos sacrificios para poder vivir como todos los demás animales del bosque, ella no podía jugar a la pelota... no podía comer lo mismo que los demás... no podía siquiera tomar un lápiz en el colegio pero nada le importaba!!! ella se las arreglaba para hacer las cosas lo mejor posible, había aprendido a adaptarse.

El conejo no podía creer que la tortuga no parara en el descanso y siguiera su camino; él se ponía a la par para burlarse de ella lo que hizo que se quedara sin aliento en varias ocasiones. 
Al rato el conejo no podía más!! no podía respirar... pero tampoco quería abandonar la carrera así que siguió pero más lento, la tortuga en cambio no paró su ritmo, seguía la ruta siempre igual, no paraba para tomar agua porque ella siempre se hidrataba bien y comía frutas jugosas que la ayudaban, y a pesar de que la tortuga ya era grande y las piernas le dolían, podía seguir porque siempre se entrenaba, en el prado... en el agua.... nunca dejó de moverse y comer cosas sanas, no tenia ni una gota de grasa ( el conejo ya estaba barrigón ).


Llegando al tramo final de la carrera la tortuga estaba tranquila,  seguía sorteando obstáculos porque ya estaba acostumbrada, toda su vida fue una prueba detrás de otra; pero el conejo la miraba desde atrás y a la par de un caracol que se burlaba de él no dejaba de sorprenderse del animal al que quiso humillar y no pudo.Mínimo el conejo hubiera querido que la tortuga se rompiera una pata trepando y cayendo pero no pasó,ella comía de todo y el calcio en sus huesos endurecieron sus patas cortitas. 

La tortuga ganó la carrera!!! el conejo no lo soportó y sin terminar de correr hasta la llegada se fue y se escondió en bosque para que no lo vieran.

Tal vez la moraleja sea que a pesar de tener más dificultades en la vida, la tortuga supo aprovechar lo aprendido y quiso además mejorar esa vida... el conejo confiado en que nunca tuvo problemas no supo valorar las capacidades de la tortuga y se dejó estar sin entender el valor que otros le daban a las cosas.