CUENTOS CLÁSICOS PARA HIPERLAXOS...

CUENTOS CLÁSICOS PARA HIPERLAXOS...
Para todos los que nos preguntamos si la historia hubiera sido diferente si los protagonistas hubieran sido diferentes... hiperlaxos como nosotros... qué hubiera pasado ???

domingo, 2 de noviembre de 2014

LOS TRES CHANCHITOS Y EL LOBO.


Había una vez tres hermanos Chanchitos, ellos iban a construir sus casitas cerca una de la otra porque no estaban acostumbrados a estar alejados...
Cuando eran chicos estaban muy unidos, su mamá los crió con mucho amor y entre ellos se querían mucho.
Pero los Chanchitos tenían un problema ahora que vivían solos no se cuidaban tanto como cuando estaban en la casa con su mamá, no comían bien y no hacían ejercicios lo que con el tiempo les trajo algunos problemas.
Por ejemplo al armar sus casitas... el primer chanchito era debilucho, poco atlético nunca hizo ejercicios  por flojo, era tan flojo que no quería ni subir la escalera para bajar las jugosas naranjas que debía comer en el desayuno, mucha vitamina C era lo que necesitaba pero no! no se iba a tomar la molestia de bajarlas y pelarlas... sus músculos parecían de gelatina, y por vago solo se le ocurrió que su casita la haría con el menor esfuerzo... la haría de paja!!.

El segundo chanchito también era vago y ni siquiera quería hacer su saludable comida, pedía toda comida chatarra y se puso gordito al poco tiempo, sin fuerzas no pensaba ni salir a caminar para mantenerse en forma, si bien era un poco más  fuerte que el primer hermano tampoco pensaba armar su casa con mucho esfuerzo, así que la construyó con ramas.

El tercero fué el único que siguió los consejos de su madre, su médico y su profesor de gimnasia del colegio, comía sano, tomaba sus vitaminas y hacía ejercicios para fortalecer sus músculos, estaba redondito de salud!!!Su casa la construyó con ladrillos y cemento... tenia la fuerza para hacerla, tenía la energía para terminarla y tenía sobre todo la voluntad de hacerla fuerte!!!

Pero un buen día se corrió el rumor de que un lobo merodeaba por ahí y quería comerse a los Chanchitos...
 ( al lobo lo tomé prestado del cuento de Caperucita )

El Lobo estuvo un buen tiempo observando a los Chanchitos hacer sus casitas... vió que el primero a cada rato debía parar de levantar las paredes de paja porque se acalambraba!!! el segundo paró de acomodar las ramas porque le bajaba la presión y se descomponía cada vez que hacía un esfuerzo... pero el tercero solo paraba para descansar, tomar sus licuados o hacer la comida con tiempo para no tener que pedir Delivery.

Pensó que era fácil empezar por el primer Chanchito y fué a su casa para engañarlo, así que golpeó la puerta y le dijo que era para hacer una encuesta y el Chanchito confiado abrió sin mirar. Cuando vió al Lobo parado en la puerta rápidamente la cerró y no le dio tiempo a nada!! cosa que al Lobo lo enfureció.
Como había sido tan rápido?,se preguntaba el lobo hambriento; así que con todo el odio del mundo sopló sobre la casita que se destartaló en un segundo, pero el chanchito ya no estaba ahí...
El Lobo no contaba con la agilidad del chanchito que cuando quería podía ser un gran contorsionista!!! salió por el primer hueco que se abrió en la pared de su casita y fue corriendo a la del segundo hermano pensando que era esa casa más fuerte.

Sabiendo el segundo hermano que un lobo feróz quería comérselos no pensaba abrir la puerta, pero el Lobo descubrió que con un simple soplido pudo derribar la choza, así que probó otra vez en la casa de ramitas y también cayó en un rato, el tiempo suficiente para que el primer hermano se metiera por un hueco para escapar pero el segundo al quedarse atorado no pudo hacer lo mismo e intentó otra cosa... derribar otra pared para hacer un hueco más grande y poder pasar por él, lamentablemente en este intento por salvar su vida se esguinzó la pierna y llegó rengueando a la casa del tercer hermano justo a tiempo para que el Lobo no lo coma.

Estando los tres hermanos en la casa de material ya no tenían de qué preocuparse, el Lobo sopló y sopló hasta que se cansó pero no pudo tirarla y los Chanchitos se salvaron aprendiendo una gran lección: no hay que ser flojo ( aunque no tengas ganas hay que hacer las cosas que nos recomiendan mamá, médicos y profesores) porque a la larga es para bien de uno... comer sano, mantenerse en movimiento, seguir consejos... solo así se pueden levantar paredes fuertes!!!

Colorín colorado... el cuento ha terminado!!! <3  

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